En el Centro Agroproductivo de Barcelona, ubicado cerca del Internado Judicial José Antonio Anzoátegui, conocida como la cárcel de Puente Ayala fue inaugurado en el 2014 con una capacidad para albergar 800 reclusos hoy tiene más de 1.500 presos que están padeciendo por la falta de comida y agua según pudo conocer el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP).
Carolina Girón directora del OVP expresa que no es la primera vez que existen denuncias a la organización por la mala alimentación en el penal recuerda que en noviembre del 2018 hubo un motín que lo generó la falta de comida luego de que la situación fue visibilizada les dieron comida pero este 2019 con el pasar de los meses la distribución de alimentos ha desmejorado hasta el punto de ser nula.
Los familiares de los presos denuncian al OVP que desde hace cuatro meses vienen manteniendo un régimen alimenticio que los ha hecho rebajar más de 20 kilos y que va a terminar de matarlos de hambre porque a la semana le pueden dar tres veces comida, cuando lo hacen es agua de pasta y unas arepas que describen como un CD por lo delgadas que son. Si en la semana reparten tres o cuatro veces la comida a la siguiente no cuentan con la misma. Explican al OVP que los presos han solicitado la información a las autoridades y la respuesta es que no les llega comida del Ministerio de Servicio Penitenciario.
Ante tal situación OVP supo que como medida les están dejando pasar comida los días de paquetería porque la visita que es normalmente cuando la llevan se da una vez al mes, “lo que supuestamente producen en ese penal es para un grupo privilegiado” dijo un familiar. De la misma forma otros han logrado pasar comida cruda, pero existe otra situación de los más de 1.500 presos que conviven en este recinto carcelario existe un amplio registro de que muchos no reciben visitas sobre todo los que tienen causas o son naturales de Nueva Esparta.
Son más de 500 margariteños que están en Puente Ayala según pudo conocer OVP y fueron trasladados hasta este penal una vez se desalojó Internado judicial de la región insular de San Antonio en Margarita. Los familiares de estos internos se encuentran en distintas situaciones unos que tienen años que no los ven por la situación económicas, otros que buscan apoyo en otra familia para enviar algo cuando corresponde la visita y los que van a visitar gastan en pasaje al salir de la isla entre 140 a 200 mil bolívares, sumado a ello deben tomar en dos o tres carritos para llegar al penal. Estos familiares hoy exigen que los presos margariteños sean devueltos a la cárcel de San Antonio para así permitir que sean trasladados a tribunales cuando le corresponde porque es otra situación que afrontan los presos margariteños que el traslado no es constante porque tienen problemas con el transporte situación que genera un retraso en cada una de sus causas.
Estos hechos al igual que todas las denuncias que maneja OVP serán notificada a la Comisión Interamericana de DDHH, al Relator de Personas Detenidas en Las Américas de la CIDH, Sistema Interamericano a la Relatoría de Personas Privadas de Libertad y Relator de Venezuela de la CIDH, al Sistema Universal al Comité Contra la Tortura y otros Tratos Crueles Degradantes e Inhumanos a la Relatoría de Detenciones Arbitrarias.
Prensa Observatorio Venezolano de Prisiones
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