Hace 18 años nació el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) organización no gubernamental en defensa de los derechos humanos de los privados de libertad, se registró precisamente el día de la Virgen de las Mercedes patrona de los cautivos.
Su fundador el abogado y ahora comisionado para los Derechos Humanos, Humberto Prado, indicó que OVP ha marcado un marcado un espacio importante en la defensa de los privados y privadas de libertad, de los niños nacidos en prisiones. Recordó que los inicios de la organización en cuanto a acompañamiento y asesorías fueron en plazas públicas de Caracas, posteriormente lo hicieron en escuelas y al pasar del tiempo bajo la bendición del Monseñor Mario Moronta, del padre Arturo Paradas y el acompañamiento de los familiares de los presos inauguraron la sede del OVP.
Prado señala como victoria de OVP que después de un largo y arduo proceso de trabajo los casos de Vista Hermosa y la masacre de San Félix hayan podido llegar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos y lograr que los familiares de estas víctimas fueran escuchadas.
Humberto Prado, fundador de esta organización indicó que OVP es una escuela y hasta una referencia académica para muchos estudiantes, señala que en las Américas es la única organización que se encarga de escribir de temas de privados de libertad y aunque han sido señalados y perseguidos por los gobiernos que han estado “OVP siempre ha mantenido su posición, así seamos incómodos somos la voz de quienes no tienen voz”.
Por último, Prado manifestó a todos los integrantes de OVP que servir a los desposeídos y más vulnerables debía llenar de satisfacción al equipo e indicó que cuando se sientan atacados por los gobiernos de turno “siéntanse bien porque van por buen camino”.
Por su parte Carolina Girón, directora de OVP indicó que el trabajo de la organización ha sido constante y sostenida labor en defensa de los derechos humanos de las personas privadas de libertad, un trabajo tenaz de mucha constancia. Describe a la organización como un apostolado y agradece a todo el equipo su apoyo, ayuda y colaboración.
OVP celebró su día presentando el documental “Horror tras las Rejas” en el que mostraron la realidad de las cárceles venezolanas donde la violencia, las muertes por enfermedades, el hacinamiento y el retardo procesal sin las problemáticas presente. Girón aclaró que las cifras y testimonios recogidos en este documental son del 2018.
Sin embargo la realidad allí mostrada sigue vigente y las muertes por enfermedades y desnutrición en los penales se han multiplicado, manifiesta la directora de OVP que la situación en los penales ha empeorado a tal punto que el hacinamiento se ha convertido en crítico y ronda por alrededor de un 167%.
Lamenta que las personas encargadas del Ministerio de Servicios Penitenciarios no han tomado cartas en el asunto y que OVP no se ha quedado en la denuncia, también se han hecho propuestas para coadyuvar en el mejoramiento del sistema penitenciario y no han sido escuchados.
Alfonso Maldonado, representante de la Vicaría de Derechos Humanos de la Arquidiócesis de Barquisimeto, manifiesta que desde la sociedad es un desafío devolver la dignidad al recluso y esto se podría lograr si la sociedad se reconcilia con devolver la diversidad, pluralidad y lo que es la problematicidad de la vida y que las relaciones sociales se lleven sin ningún tipo de problemas, pero el padre manifiesta que esa situación es irreal.
“El espacio carcelario de un ser humano que ha incurrido en ciertos errores, debe poseer ciertas características para que pueda recuperarse de tal modo que se hable de redención y que el ser humano pueda redimir, para que más adelante pueda reinsertarse como ser humano a la sociedad”, manifestó el padre Maldonado.
El representante de la Vicaría de DDHH de la Arquidiócesis de Barquisimeto explica que la palabra redención es una palabra que para los que somos cristianos y tiene resonancia del punto de vista religiosa, las familias buscaban libertad a los parientes que estaban en esclavitud en otros pueblos y precisamente en ese acompañamiento a la familia de los privados de libertad nació por parte de la iglesia la pastoral penitenciaria, quienes están acompañando en el proceso a algunos presos.
Por otra parte Darlene Zambrano, coordinadora de OVP por el estado Guárico indicó como la región en la que vive fue el primer estado que tuvo la Penitenciaría General de Venezuela (PGV) en donde se albergaron todas las personas privadas de libertad del país.
Con el documental “Horror tras las Rejas” rememoró los recorridos que hizo por ese penal y las cosas que pudo observar allí adentro, desde el desalojo del recinto penitenciario la PGV fue clausurada y explicó que aunque Iris Valera indicó que la cárcel 26 de Julio había sido construida, dicha información es falsa, porque no es más que un viejo centro comercial que fue adaptado como centro de reclusión y que hoy en día no cuenta con servicios básicos, no tienen asistencia médica, no existe una ambulancia para su traslado a un centro asistencial y su alimentación es una vez al día. Denunció Zambrano que existen alrededor de 400 privados de libertad enfermos con tuberculosis y una población inmensa pasando hambre.
“Todo lo que vimos en ese documental es poco para lo que se vive ahora en ese centro penitenciario”, sentenció la coordinadora de OVP Guárico.
“Quienes representan el estado venezolano se han abandonado a las personas privados de libertad a tal punto que la obligación que tienen de garantizarles la vida y sus derechos humanos no existen, lo que les imponen es una pena de muerte que lamentablemente pareciera una política de Estado”, indicó Leticia Núñez, coordinadora de OVP Monagas al comienzo de su intervención.
Núñez enfatiza que en las cárceles hay desnutrición, tuberculosis, enfermedades infecciosas, hepatitis, malaria entre otras.
De la misma forma indica que la impunidad y el retardo procesal han generado un hacinamiento incontrolable e histórico en cárceles y comisarías del país, estas últimas pasando a ser calabozos transitorios en recintos permanentes.
La coordinadora de OVP de Monagas, señala que es la corrupción la que está matando a los privados de libertad del país.
“La corrupción mata cuando el privado de libertad no tiene acceso a la comida y muere por desnutrición, la corrupción mata cuando el privado de libertad no tiene acceso al sistema de salud ni medicamentos, la corrupción mata cuando un interno muere porque un proyectil le quita la vida. Recordamos que el monopolio de las armas lo tiene el Estado, cada persona asesinada en un penal con un proyectil la bala dice cavim y hay una responsabilidad del Estado por cada muerte”, sentenció la abogada y defensora de derechos humanos.
Para Núñez el OVP tiene un deber moral y que mueve a la organización a continuar trabajando por los derechos humanos de los privados de libertad.
Por último nuestra directora Carolina Girón, agregó que la labor de los coordinadores en cada una de las regiones era titánica y expresaba su admiración a cada uno de ellos, porque trabajan en otros contextos y enfatiza que la labor del OVP se realiza porque aman lo que hacen.
“Cuando el OVP hace una denuncia hace una denuncia, no es que está defendiendo delitos, estamos defendiendo a una persona que debe ser tratada dignamente, una persona que lo mínimo que le deben dar cuando está bajo custodia es agua y comida, que si necesitan un medicamento hay que dárselo y eso no se cumple en las prisiones. Esta situación penitenciaria no tiende a mejorar”, puntualizó Girón.
Prensa Observatorio Venezolano de Prisiones
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