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Dos presos muertos y 26 heridos fue el saldo de motines en Mérida y Monagas

La violencia desatada durante los últimos días en dos centros de detenciones policiales de Mérida y Monagas es claro reflejo del colapso penitenciario en Venezuela. Los hechos, que causaron angustia y mucho dolor entre los familiares, dejaron un saldo de saldo de dos presos fallecidos y 26 lesionados.

Este domingo 7 de febrero, pasadas las 2:00 de la madrugada, se registró una explosión en el calabozo 3, conocido como “El Rastrillo”, en el Centro de Coordinación de la Policía de Monagas.

El estallido alertó a los funcionarios de guardia, quienes al asomarse notaron que habían reos heridos dentro de la mencionada celda, que a su vez está rodeada de otros calabozos.

El equipo del Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) conoció que 17 presos fueron trasladados al principal centro asistencial de Monagas, donde corroboraron el fallecimiento de Ronny Samuel Guaratarasma, de 20 años de edad, quien presentó múltiples heridas por las esquirlas.

En tanto, otros dos reos permanecen en delicado estado de salud, uno de ellos fue intervenido quirúrgicamente en horas de la mañana de este domingo. El resto de los heridos estaba bajo supervisión médica.

Según información de la prensa local, los reclusos lesionados por las esquirlas fueron identificados como: Nendiv Isanare (18), Gregorio Rodríguez (18), José Gabriel Orozco (18), José Gregorio Martínez (19), Leomar López (20), Rómulo Porado (20), Yaniel José González (21),  José León (23), Joel José Idrogo (24), Gran Romero (23),  Did Gutiérrez (25), Rafael Barreto (28), José Javier Salazar (29), Anderson Sanabria (31), Domingo Salamán (32) y  Ángel Rodríguez (39).

La versión oficial indica que se trató de un motín por el control interno entre los presos; sin embargo, existe una versión extraoficial en la que señalan que uno de los privados de libertad manipulaba la granada y como consecuencia se registró la explosión.

Sin información

Familiares de los presos de la Policía de Monagas se aglomeraron en las afueras de la comisaría y en el Hospital Central con la finalidad de conocer los detalles sobre el estado de salud de sus seres queridos.

Trascendió, según la versión de los familiares, que el joven fallecido dormía en una hamaca improvisada con sábanas, pues en la celda donde ocurrieron los hechos no hay espacio suficiente para la cantidad de presos que incluso se ven obligados a dormir de pie.

El equipo del OVP conoció de primera mano que este recinto policial alberga a 360 privados de libertad, aunque fue construido para un total de 40 personas, quienes legalmente no deberían permanecer en este lugar durante más de 48 horas.

En El Vigía se alzaron

En otro orden de ideas, durante la madrugada del sábado 6 de febrero en el Centro de Coordinación Policial Número 8 de El Vigía, estado Mérida, se registró un motín que también culminó con un saldo fatal.  Un preso fallecido y diez lesionados fue el resultado de esta revuelta.

El equipo de OVP Mérida confirmó que se trató de una riña por lucha de poderes entre reclusos. En tanto, el reo fallecido fue identificado como Rene Antonio Mendoza Rendirles, de 32 años de edad, quien murió a causa de traumatismo craneoencefálico.

Durante el motín resultaron lesionados Diego Antonio Duran Yaguarán (20), Guillermo José Botero Benavides (23), Darío Alexander Guerra (24), Néstor José Martelo Arrieta (25), Pablo Enrique Pérez Rubio (25), Ángel Eloy Porras Ceballos (26), José Tomás Mora Pineda (30),  Luis Carlos Mendible Ruiz Díaz (30) y Jhony de Jesús Vargas Franco (36).

Los lesionados presentaron heridas por arma blanca en la cabeza, brazos y piernas, mientras al menos dos de los reclusos sufrieron heridas por arma de fuego.

De igual manera se conoció que estos calabozos tienen hacinamiento crítico, al igual que en Monagas, con un total de 150 presos en una área extremadamente pequeña e inadecuada para el tratamiento de los privados de libertad.

Familiares solicitan investigación

Por otra parte, los familiares exigieron una investigación exhaustiva, oportuna y veraz sobre ambos hechos, principalmente para determinar de dónde provienen las granadas y otras armas que se encuentran en manos de los presos.

“Nos revisan la comida, muchas veces la llevamos en bolsa transparente y las visitas son muy pocas y cortas. También nos requisan, por lo que es evidente que ningún familiar ingresó estas armas. Es necesario que investiguen sobre la corrupción policial dentro de los calabozos”, detalló uno de los angustiados padres.

Por último, solicitaron planes de descongestionamiento en estos calabozos porque aseguran que una de las causas del hacinamiento es el retardo procesal que azota a la población penal de todo el territorio nacional.

Prensa Observatorio Venezolano de Prisiones

El Observatorio Venezolano de Prisiones es una organización no gubernamental, fundada en el año 2002, que tiene como principal atribución velar por el debido respeto de los derechos humanos de las personas privadas de su libertad en el territorio nacional.